  El lector nuevo, curioso, que por X motivo se encuentra ahora leyendome desconoce mis habituales “cantaletas”, pero si ya regresaste por vÃa de bookmarks, entonces ya seguro tienes un rústico bosquejo de mi manera de pensar, y por lo tanto sabes cuales son mis mas predecibles posturas. Laica, nacionalista, estatista,ya saben por donde voy. Al pasar los años uno puede pulir los bordes cortantes y asperos, se rectifican los errores, remueven las falacias culturales, aunque esten bien inculcadas, etc…pero el carácter, la esencia de una persona no se pierde jamas. Digamos que somos ante todo almas con predisposiciones y tendencias, lo que claro, de acuerdo a tu entorno vestirás y adornaras tu alma.
El otro dÃa, una persona tomo su tiempo en cubrirse bajo un manto de anonimato ( poseÃdo por una gran pasión perturbadora ) para enviarme un correo bastante largo y gráfico. Esto realmente no abunda ni es corriente, pues increÃblemente a pesar de yo haber escarbado al aire libre mi trinchera polÃtica, la recepción ha sido aceptable, en parte porque lo hago sin armas, sin apoyo de ningún poder, ni juego sucio contra nadie. En este correo resaltaba una acusación continua : el ateÃsmo soviético. No estoy ajena al viejo ateÃsmo militante que reinaba durante la época mas económicamente prospera de la Revolución Cubana. El modelo humanista donde la voluntad suprema del hombre Marxista-Lenistas construÃa caminos luminosos en medio de tinieblas oscurantistas, libre del encadenante opium clerical este individuo desarrollaba su potencial para romper montañas y andar sin Dios. Me viene a la mente las historias reales de maestros soberbios buscando entre sus alumnos a quien creÃa en Dios. Cuidaito, ¡no levantes la mano! que seras despreciado, marginado y burlado. Eso lo se, pero igual se que ya es tan solo el pasado.
Hoy en dÃa Cuba casi, casi se va al otro extremo, favorecer una religión en particular. Pero no tratare ese asunto en este post. La realidad es que nadie es condenado por su religión actualmente, mas bien se estimula la fé. Los ciudadanos religiosos ahora sacan de sus viejos armarios y closets los cuadros o estatuillas y orgullosamente los cuelgan para los ojos de todos. Esto en parte se debe a que la población esta envejeciendo en un paÃs no próspero, y las amarguras de la vida cotidiana, sumadas a la brevedad de la vida, empujan a casi todos hacia el consuelo de la religión. Yo no vivo en Cuba, y en este paÃs siempre cada cual ha demostrado su creencia sin temor, apoyado por viejas leyes de libertad religiosa. Ahora, hay una lÃnea muy fina pero señalada entre el buen gusto y el proselitismo. Ustedes, saben que creo firmemente en la separación del Estado y la región…pero no por defender esta campaña me hace atea. En lo privado, yo soy una persona sumamente religiosa. Siendo pequeña, una fiñe, sin apenas saber hablar; pues me dicen que era muy callada cuando niña, recuerdo estar jugando en un patio interior o pasillo donde caigan gotas de lluvia amazónica por la tarde y mis padres estudiaban la biblia en privacidad. Cuando eso era solo un libro pero mas adelante me entere de la historia de Adan y Eva, de la misión de Moisés y entendÃa cada vez mas porque los viernes mis padres preparaban mas comida de lo usual para luego reposar el sábado. ¿ Porque los sábados nos rodeábamos de libros y no salÃamos de la casa? Cuando aquel amigo de mi papa, un sacerdote católico (Sardui), nos recibÃa con tanta amabilidad me daba de entender que cada religión en Camaguey contaba con miembros ejemplares. El sacerdote siempre mientras hablaba con mi papa me daba un paseo por un jardÃn dentro de un enorme patio colonial dentro una vieja iglesia(La merced), caminábamos por un caminito selecto y me pedÃa que le cojiera la mano por el meñique, a nuestro lado siempre iba un perrito negrito y muy peludo que el sacerdote adoraba.. No se porque guarde ese detalle, cosas de niños. En otra ocación recuerdo que me encuentro sentada frente a un gran TV a color, viendo por casete una pelÃcula de Moisés de los años 50 en un cuarto dentro de la Iglesia (La Merced). De esa época recuerdo también dos muchachas hijas de un pastor adventista, que jugaban conmigo como si fuera yo una muñeca, sentándome en sillitas y haciéndome lazos en el pelo… Si creo que las religiones se pueden dar la mano, pero solo cuando se encuentran en iguales posiciones de reconocimiento. Ningún templo esta por encima del otro, aunque cuente con torres mas altas o mas fieles miembros.
Quien me envió ese correo asume que por mi laicismo soy una ferviente atea sin principios. Cuan lejos de la verdad se encuentra. Desde que nacà he descansado los sábados en honor a la creación de Dios, siempre he observado estrictamente la ley del levÃtico, no observo festividades ajenas, etc. Mi vida entera esta dirigida por leyes exactas, preceptos y creencias absolutas. Tampoco soy una judÃa tradicional ¿ Quieres saber cual es mi constitución cotidiana ? LOS DIEZ MANDAMIENTOS. Yadira Escobar no va asesinar a nadie jamas, ni daré nunca un falso testimonio, entre otros. Me podrán decir que no estoy libre de dogmas, pero responderé que no se puede ser tan dogmático de prohibir ningún dogma. ¿ Acaso no es un dogma la justicia de las democracias ? Hay ciertos pensamientos que los damos por ley absoluta y no por eso dejan de ser inspiradores del bien. Yo no soy una persona de dudas, de contradicciones ni inseguridades y NO TODO es relativo, pero tampoco soy fanática.
Nadie es perfecto, TODOS cometemos errores y hacemos injusticias, y creo que solo temiendo un código preciso de leyes es que el ser humano puede encontrarse con limitaciones sanas. ¿Estan de acuerdos conmigo de que una persona sin barreras, sin frenos éticos ni morales tiene un gran potencial de convertirse en un monstruo, verdad? Y esa es la contribución social de las religiones con un código moral de conducta. Ahora…ese freno necesario a las malas tendencias del humano, o bien es civil o religioso en dependencia del tipo de sociedad. Si el ser humano no teme a Dios, entonces quizás es conveniente que tema a un policÃa severo, a fin de cuentas el freno se deriva en respeto, y sin eso es imposible la civilización.
Creo que mas allá de la conveniencia del sentimiento religioso al orden social, nuestra vida humana tiene un objetivo, y un significado para quien nos creo, y siento un profundo respeto y amor por ese Creador. Ser religiosa, no me lleva a no creer en la existencia de “Ateos Virtuosos”, que por estar desvinculados a los clubs o gremios de fé, no dejan de tener iguales derechos frente a la ley, pues la ley esta por encima de todos.